Alberto Araoz
El FRI fue fundado en 1947, dentro del sector público, para manejar los aspectos científicos y tecnológicos de la plantación de bosques y el procesamiento de los productos madereros. Tenía una trayectoria distinguida como institutos de investigación de primera clase que eventualmente cubría el amplio espectro que va desde la biología de tres especies hasta la exportación de los grupos madereros. También hacía una labor de excelencia en la creación de nexos con el sector productivo y la transferencia de las tecnologías que desarrollaban.
Cuando llegó el momento de definir las características de los nuevos Institutos de la Investigación de la Corona, el FRI se usó como modelo de algunas de esas características, y el mismo se convirtió en uno de los nuevos CRIs.
La nueva institución ha sido dotada con todas las características de un CRIs que la hacen flexible y eficiente. Se han hecho algunas reestructuraciones, pero ha habido continuidad con la gente, las instalaciones físicas y las investigaciones y las otras actividades que se siguen llevando a cabo.
Nueva Zelanda ha introducido las especies pinos radiata de California, las cuales se han adaptado muy bien a las condiciones locales y muestran una tasa de crecimiento rápido y de buena calidad en sus maderas.
Los productos forestales se han convertido en una industria clave. 1.2. millones de hectáreas de radiata están plantadas actualmente y el país produce al momento 13 millones de metros cúbicos por año, supliendo las necesidades de Nueva Zelanda de madera, pulpa y papel y tabiques; 3 millones de metros c´bicos son para la exportación con un valor de casi 1.4 mil millones de dólares neozelandeses (780 millones de dólares americanos) al año, cerca de 8.5% de todas as exportaciones.
Para el año 2020 el país debería ser capaz de proveer 25 millones de metros cúbicos de madera de una manera constante, con la mayor parte del incremento destinado a la exportación.
El FRI se dedicó a cubrir de una manera extensa las investigaciones en plantaciones de bosques, tecnología maderera y ambiente forestal. Hoy día en la principal organización de investigaciónen bosques y productos forestales con más del 80% de los fondos para investigación disponibles. El total del personal en junio de 1991 era de 507 personas con aproximadamente 150 científicos y 150 técnicos.
En años recientes, respondiendo a la aplicación de la políticadel “usuario-paga” en 1987 y debido a la disminución de los fondos del gobierno, el FRI se procuró activamente ingresos externos. Esto significó un cambio total de mentalidad. El instituto procedió a reforzar sus relaciones con la industria forestal y con otros clientes. Aumentó sus esfuerzos para proporcionar a sus clientes tecnología y servicios, para comercializar los resultados de las investigaciones y los desarrollos tecnológicos y para vender los servicios en el exterior. De esta forma fue capaz de disminuir su dependencia de los fondos gubernamentales del 99% al 66% para el momento en que se convirtió en un CRI.
Después de la reestructuración en 1989/90, el FRI ha tenido cinco divisiones dedicadas a las siguientes áreas de investigación: tecnología forestal, tecnología maderera, ecosistemas, cosechas y pulpa y papel.
Las últimas dos divisiones son Asociaciones de Investigación establecidas junto con la industria; la Organización de Investigación de la Industria Forestal (LIRO) y la Organización de Investigación de Pulpa y Papel de Nueva Zelanda (PAPRO). Las compañías miembros contribuyen con los recursos económicos para la investigación. Por ejemplo el PAPRO conduce investigaciones generales y aplicadas de la pulpa y el papel, con énfasis especial en el pino radiata, el desarrollo de pulpa más eficiente y más aceptable desde el punto de vista del ambiente, las tecnologías de blanqueos y los procesos de fabricación de papel, y el desarrollo de mejores productos.
Las principales fortalezas del Instituto son la naturaleza de integración vertical de su estructura y sus actividades de investigación, balance razonablemente bueno entre la investigación estratégica aplicada y la comercial a largo y a corto plazo y la alta calidad del personal científico.
La investigación, tanto la estratégica como la orientada comercialmente, son las principales actividades del FRI. Las principales áreas de investigación van desde la genética y la gerencia forestal hasta el comercio, el mercadeo y la economía. La investigación en colaboración se lleva a cabo también con otras instituciones y otros países.
Con respecto a los servicios, el FRI trabaja para el gobierno, da consultas y entrenamiento a la industria (especialmente en tecnología maderera y de pulpa de papel), da asistencia a organizaciones del exterior que intearctúan con el sector forestal, tales como los proveedores químicos, los fabricantes de maquinaria y las compañías de transporte y presta servicios de consultoría a clientes del exterior en más de 30 países.
Cuando sus objetivos de ingresos se incrementaron, el FRI tuvo la inteligencia de patentar sus nuevos procesos, un paso costoso pero necesario. Cerca de 15 tecnologías nuevas han sido patentadas desde 1987, algunas de ellas en muchos países.
Una de las características más interesantes del FRI ha sido la manera activa y eficiente como se ha relacionado con las dependencias productivas a las cuales sirve. El FRI ha venido a ser considerado por la industria como el “sitio para comprar” investigación y asesoría técnica. La transferencia de tecnología se realiza a través de contactos personales, informes, publicaciones, software, conferencias, seminarios, juntas de trabajo, y cursos de entrenamiento.
Debemos mencionar en particular la relación con el FAFPRO, Organización de Investigación Forestal la cual tiene cuatro Juntas de Directores de Asesoría en Investigación de tecnología forestal, cosechas de bosques, tecnología maderera y pulpa y papel, patrocinadas por la industria. Cada Junta está en contacto con la división correspondiente del FRI y ayuda a desarrollar programas de investigación y a coordinar la búsqueda de fondos. Las Juntas de la FAFPRO han sido de gran valor para el FRI, en la asistencia para el éxito de los procesos de licitación por los dineros del PGSF y para asegurarse de que los resultados de las investigaciones sean tilizados efectivamente.
Sin embargo, existe el sentimiento de que la ciencia fundamental y estratégica sufre cuando los científicos se involucran demasiado con la transferencia de los servicios de tecnología. Este es un punto que el FRI comparte con muchos institutos de investigación aplicada alrededor del mundo. Se requiere de un delicado balance entre las actividades de investigación básica y aplicadas, el cual puede variar de un momento a otro. Para alcanzar el balance correcto se necesita, probablemente, de más arte que ciencia.
El primero de julio de 1992 el FRI dejó de ser parte del Ministerio Forestal y se convirtió en un Instituto de Investigación de la Corona, manteniendo la mayor parte de sus divisiones excepto la parte de Ecosistemas. Sin embargo, pocos cambios han ocurrido en el personal científico y técnico y hay un alto grado de continuidad en las actividades del antiguo FRI.
El FRI tiene actualmente un personal de 450 trabajadores con un presupuesto total cercano de los 30 millones de dólares neozelandeses (16.7 millones de dólares americanos), de los cuales el 66% proviene del gobierno a través de los proyectos financiados por el PGSF, más una cantidad moderada perovital del PGSF de los recursos para resultados-no-específicos del orden de los 2 millones de dólares. Los fondos de las fuentes no gubernamentales, principalmente de la industria de Nueva Zelanda, han aumentado su contribución en mayores proporciones desde 1987.
El nuevo FBI define su misión como sigue: “Conseguir la excelencia en la investigación, innovación, desarrollo y transferencia de tecnología en materia forestal y en productos forestales para el beneficio de Nueva Zelanda”. Como Instituto de Investigación de la Corona, el FRI disfrutará de una mayor flexibilidad para trabajar conjuntamente con la industria, las instituciones financieras y otras organizaciones para desarrollar y comercializar nuevas tecnologías. Como centro de excelencia internacionalmente reconocido,con récord comprobado de logros, el FRI está bien posicionado para proseguir sus estrechas relaciones con la industria y para tomar ventaja de que las nuevas oportunidades que le presenten el ser del ambiente CRI, principalmente su estructura de compañía con flexibilidad comercial y responsabilidad limitada, así como también los fondos para resultados-no-específicos que le permitirán acometer investigaciones de su escogencia a más largo plazo.
Como en otros CRIs, los seis miembros de la Junta Directiva fueron nombrados por el gobierno, después de una selección de un grupo de candidatos sugeridos por muchas organizaciones. Los miembros provienen principalmente de las comunidades comerciales y de la investigación y traen con ellos una vasta experiencia.
El FRI es manejado por un Gerente Ejecutivo (CEO) nombrado por la Junta Directiva, ésta es a misma persona que manejaba el antiguo FRI. El FRI ha expendido su estructura en comparación con el antiguo FRI, tiene seis divisiones de ciencia. Hay una división de Biotecnología, y dos de Procesamiento de Madera y Productos Madereros que reemplazan a la antigua División de Tecnología Maderera. También existen cuatro divisiones corporativas.
Se ha preparado un plan de negocios y se ha puesto mucho énfasis en estrechar las relaciones con la industria y otros clientes con la idea de incrementar los ingresos comerciales del instituto. Como dijo el Director del FRI: “nuestros científicos se han ido acostumbrando a la idea de la orientación hacia el mercado. Antes era: “el empuje de la tecnología”, algo que sonaba como “buena ciencia”. Ahora tenemos que estar conscientes del valor comercial, de lo que es el mercado”. Ahora, mucho dependerá de las dos divisiones corporativas que actúan respectivamente en estrategias y actividades comerciales.
Bajo el viejo sistema, como parte del Ministerio Forestal, el FRI trabajó para desarrollar un número de características muy positivas. Adquirió un reconocido alto grado de excelencia científica e integró verticalmente sus actividades de investigación a través de todo el espectro forestal, desde árboles hasta productos terminados. Fue capaz de construir contactos fructíferos y eficientes con la industria en particular a crear dos Asociaciones de Investigación, LIRO y PAPRO, como divisiones del FRI. Desarrolló su clientela tanto dentro como fuera de Nueva Zelanda y se manejó para producir ingresos que cubrían el 33% de su presupuesto.
Al convertirse en un CRI el Institutoganó ciertas ventajas en autonomía, flexibilidad y posibilidades comerciales las cuales le ayudarán a expandir su actividad y a hacerlo más eficiente, así como a tomar ventaja de las oportunidades comerciales que se presenten. Puede, por ejemplo, pedir préstamos a los bancos, o asociarse con la industria privada para explotar comercialmente nuevos desarrollos. Estas son características muy positivas que, si se usan con propiedad, prometen un futuro brillante al FRI.
El autor no pudo reunir mucha información acerca del IRL, que es una institución completamente nueva que nació en julio de 1992 como resultado de juntar tres antiguas divisiones de los CSIR. La División de Desarrollo Industrial fue transferida totalmente al nuevo CRI, las Divisiones de Química y Ciencias Físicas, sólo parcialmente.
El Informe del Grupo de Trabajo del Ministerio de Ciencias acerca de los Institutos de Investigación de la Corona tenía como expectativa que el IRL, pudiera contar con ingresos de aproximadamente 38 millones de dólares neozelandeses, de los cuales 27 millones vendrían del gobierno a través del PGSF (incluyendo 2.7 millones de dólares aproximadamente como fondos para resultados-no-específicos) y 11 millones de otras fuentes.El IRL es manejado por un Director Ejecutivo quien se reporta a una Junta Directiva de 7 miembros, todos ellos el sector privado. Tiene más de 350 personas en el staff con 7 divisiones: Desarrollo Comercial; Procesamiento de Nuevos Productos; Medidas Matemáticas Aplicadas y Análisis; Comunicaciones Electrónicas; Información Tecnológica; Materiales Científicos y su Desempeño; Producción, Automatización y Control; y Empaque, Almacenamiento y Transporte.
Estas divisiones tienen principalmene capacidades genéricas y horizontales, de valor para diferentes dependencias, en contraste con el FRI donde las divisiones se relacionan con dependencias específicas. Los siguientes sonconsiderados grupos de excelencia: maquinarias, semiconductores, ingeniería de terremotos y química.
El Grupo de Trabajo de Ciencias propuso en su informe que el IRL debería convertirse en un centro de competencias “con un rol especial en liderizar el desarrollo de estrategias de investigación y en promover la aplicación de tecnología en una esfera amplia de industrias”. Este enfoque global y su diversidad está en total contraste con la concentración en un sector definido en los casos del FRI o de las Asociacione de Investigación.
El IRL tendrá una clientela variada en el sector de manufactura la cual incluirá muchas industrias pequeñas y medianas particularmente en las ramas mecánicas, electrónicas y químicas, en las cuales Nueva Zelanda necesita desarrollar ventajas competitivas.
En una entrevista publicada, el Director Ejecutivo sintió que el IRL “estaría usando las libertades comerciales que tendría como una compañía para acercarse mucho más al sector comercial”. El IRL estaría, sin embargo, llevando a cabo una gran cantidad de investigaciones estratéicas para el PGSF, pero, al tener la capacidad de formar consorcios con la industria, se esperaría que hubiesen verdaderas mejoras en los desarrollos de los resultados de la investigación por la industria. El IRL ayudará a los fabricantes y exportadores a ganar las ventajas competitivas que ellos necesiten”. Por otro lado, “estando cerca de la industria ayudará al instituto a enfocar su ciencia a llenar de una mejor manera las necesidades actuales de la industria”.
Poco después de su fundación, El IRL se comprometió en un proceso de reestructuración a ser seguido por un ejercicio estratégico con el propósito de determinar cómo servir mejor a la industria. Este proceso pareció como no muy fácil, debido a que las industrias en Nueva Zelanda son muy pequeñas y fragmentadas, y en su totalidad no consideran a la función de R&D como un objetivo estratégico. Sin embargo, hay esperanza de que el IRL se convierta en un catalizador que reúna a las firmas de ciertos subsectores y defina objetivos estratégicos que pueadn ser compartidos por ellos.
El IRL estará involucrado en investigación estratégica y comercial, así como en una variedad de servicios tecnológicos tales como metrología, experimentación, calidad, “trouble-shooting” y entrenamiento en muy diferentes áreas.
El cliente más grandes es y continúa siendo el gobierno a través del PGSF para quien será llevada a cabo la investigación estratégica. Al momento el 75% de los fondos provienen de esta fuente. El Director Ejecutivo considera que este es un porcentaje muy alto y siente que la industria debería ser convencida de invertir más en R&D, agregando que para este propósito será necesario que el personal del IRL cambie su manera de pensar. Parece claro, sin embargo, que el IRL no será capaz de hacer todo lo que la industria requiere. Se debe evitar la dispersión, y enfocar los puntos fuertes y luchar para mantener la excelencia. Por ejemplo en la maquinaria, la buena capacidad existente debería ser desarrollada con más intensidad; las compañías deberían ser llevadas a explotar sus capacidades y contribuir más al proceso de desarrollo.
Darle respuesta a problemas a corto plazo, tales como la corrosión, proporcionan una cantidad significativa de los ingresos de IRL. Aquí quizá haya un elemento de investigación, pero es principalmente el uso de la experiencia existente lo que permite resolver prolemasa un nivel profundo. Algunas compañías, sin embargo, están comenzando a interesarse en trabajos a largo plazo, por ejeplo en tópicos de protección del ambiente, o en el descubrimiento de objetos muy pequeños en ciertos productos.
El IRL tiene una excitante pero no muy fácil tarea a futuro. Debe atender un mercado disperso y heterogéneo, y existe el peligro de que los esfuerzos se dispersen en cantidades muy pequeñas y de quedar atrapado en poner las mejores de las habilidades para proveer servicios a favor de la industria en vez de en las investigaciones. De otra forma, el IRL ha heredado una estructura científica que se ha desarrollado en el pasado, siguiendo los intereses temáticos de los cientificos, en vez de los requerimientos del desarrollo industrial de Nueva Zelanda o las demandas de la industria. Es probable que el IRL tenga que modificar y adaptar sus capacidades de acuerdo con factores más recientes, y esto requerirá de algún tiempo hasta que se adquieran nuevas habilidades y se expandan las facilidades físicas.
No es fácil predecir los caminos por los cuales el IRL pueda desarrollarse a futuro. El Informe CRI vio “una serie de desarrollos saliendo del CRI original: desarrollos conjuntos, quizás asociaciones de investigación y, quizás, nuevos CRIs. Estos deberán aparecer como claras direcciones en investigación a desarrollarse en las industrias que componen ests sectores dispersos”