Figura 3
El ambiente de competitividad empresarial
Javier Jasso Villazul
La competitividad empresarial ha sido identificada comúnmente con el dinamismo en el mercado (doméstico y/o internacional). Este concepto considera la presencia en el mercado de diversos actores. Esta presencia es el resultado de los esfuerzos propios, estrategias y acciones que realiza cada empresa (factores internos) y/o por la influencia de un medio ambiente (del sector, del país, de otros países, etc.,) que conforma los factores externos o no propios de la empresa. En ambos casos las estrategias seguidas por cada empresa incide en diversa magnitud en ambos niveles del escenario (véase figura 3).
Figura 3
El ambiente de competitividad empresarial
Entre los factores externos estàn la política pública, las condiciones macroeconómicas del país, la legistación, la infrestructura y el nivel educativo, entre otros. Entre los factores internos estàn la cantidad y calidad de su maquinaria y equipo, las habilidades y conocimientos de los empleados, las sinergias entre departamentos, el ambiente de competencia o cooperaciòn, la infraestrura física y tecnológica y la capacidad negociadora (vèase figura 3). Estos factores configuran un complejo escenario en el cual la competitividad de las empresas puede analizarse desde diferentes niveles. Estos niveles abarcan desde el “macro” hasta el “meta” niveles. El “macro nivel” incluye las características del país, de la trayectoria natural de la tecnología, del paradigma tecnológico y el diseño dominante; el “messo nivel” abarca la estructura y caracterìsticas de la industria; y el “micro y meta nivel” abarcan las caracterìsticas, desempeño y visión de la empresa (véase figura 4).
Estos niveles conforman el ambiente competitivo en el que participan y se vinculan, cooperan y/o compiten indistintamente las empresas, las instituciones, los gobiernos y otros actores. Estos niveles son interdependientes, por lo que la posición competitiva de cada actor puede cambiar en función de las estrategias y acciones propias y las de los otros actores que participan en los distintos niveles.En este escenario el cambio tecnológico es parte de un proceso diferenciado, acumulativo, imperfecto y en gran medida apropiable, y que más allá de discrepancias en cuanto al tiempo y a la mera sobrevivencia, contribuye a la permanencia de las empresas en el mercado en el largo plazo 8. Por ahora determinamos que la competitividad internacional empresarial debe considerar que las empresas se mantenengan y/o mejoren su posiciòn tecnológica y de mercado en el largo plazo . Este posicionamiento supone que los productos más innovadores son los que están en mercados dinámicos y por lo tanto, los que tienen una mayor probabilidad de vida en el mercado. Las empresas pueden tener una presencia creciente o igual a su situación inicial, en segmentos de mercado con productos dinámicos, lo que incluye esfuerzos y resultados de mercado y tecnológicos en el largo plazo.
Figura 4
Niveles de análisis de la competitividad
Este concepto de competitividad considera que para que la empresa pueda mantenerse en el largo plazo, es necesario que elaboren líneas de productos en mercados dinámicos, que son generalmente los más innovadores en el mercado internacional. Esta característica de la competitividad considera que la dimensiòn tecnológica es endógena a las actividades de los agentes económicos y por lo tanto pueden orientarse por la percepción de que existen oportunidades no explotadas y por la expectativa de apropiarse de los beneficios de la innovación.
Consideramos que para que una empresa sea definida como competitiva internacionalmente “competitividad real”, es necesario que tenga una participación importante en el mercado internacional con una perspectiva para mantenerse en el largo plazo en mercados dinámicos con productos innovadores. Es decir, que no necesariamente una presencia importante en el mercado internacional puede estar asociada a una posición importante en tecnología y viceversa, y por lo tanto, una posición importante en el mercado o en tecnología da como resultado una “competitividad aparente”. Las empresas “no competitivas” son aquellas que tienen una débil participación en el mercado aunada a una débil posición tecnológica (véase figura 5)
Figura 5
Resultados competitivos: real, aparente y no competitivo
En esta posición están las empresas con una alta probabilidad de perecer o permanecer en mercados estancados. Este planteamiento hace necesario el análisis de la madurez-innovación tecnológica de los productos petroquímicos 9 y el de identificar los resultados competitivos. Para medir y caracterizar la competitividad hemos propuesto una metodologìa que se basa en una tipologìa elaborada para tal fin. La tipología de la competitividad empresarial combina el dinamismo en el mercado con la intensidad tecnológica. La tipología incluye categorías que caracterizan a la competitividad empresarial en cuatro con “tipos de empresas” que definimos como de líderes óptimos, líderes de mercado, líderes tecnológicos y seguidores que corresponden cada una a “situaciones competitivas” especìficas que definimos como óptima, de oportunidad perdida, de vulnerabilidad y de alta vulnerabilidad o de retirada y los “resultados competitivos" descritos anteriormente (véase figura 6).
Figura 6
Tipología de la competitividad internacional empresarial: resultado competitivo,
tipo de empresa, características y situación competitiva
Hemos elegido a las principales empresas (57) entre las quinientas empresas reportadas por Fortune como las más importantes en ventas en 1994. Estas empresas se ubican preponderantemente en los sectores de refinación de petróleo, farmacéutico, y químico, lo que conforma el universo de la IPQ 10. Entre las 57 hemos elegido a los 20 principales grupos petroquímicos con el monto más alto en ventas en 1994, que representa el 63% de las ventas en ese mismo año, de las 57 consideradas como petroquímicas (véase cuadro 1).
Cuadro 1
Participación de los principales grupos petroquímicos internacionales 1989-1994,
(ventas en millones de dólares en porcentajes)
Fuente: Elaboración propia con base en Fortune (varios años)
Esta muestra es nuestra base para identificar la intensidad patentadora de estos grupos entre 1969 y 1996. La identificación de la etapa en la que se encuentra cada producto en el ciclo de vida y la posición en el mercado serán la base para medir la competitividad de cada grupo petroquímico en el mercado internacional (véanse figuras 1 y 6).
Los criterios para la medición de la competitividad internacional empresarial combina indicadores tecnològicos y de presencia en el mercado internacional en un periodo determinado. La definiciòn del grado de competividad indicarà que las empresas son competitivas si sus resultados son favorables al menos en alguna de las dos variables propuestas.
La medición de la intensidad tecnológica es el resultado de las patentes registradas en EUA por las empresas seleccionadas. La intensidad patentadora supone que las empresas más innovadoras son las que más patentan. Este criterio supone una edad en los productos y una alta difusión en aquellos donde menos se patenta, ya que se trata de ramas con tecnologías disponibles en donde se ha hecho un uso y protección de 20 años por la patente emitida 11. Nuestra fuente de información procede de las patentes registradas en EUA y hemos realizados la selección con base en las 20 principales empresas con mayor participación de mercado que es el resultado de las ventas totales del grupo corporativo.