ISSN-L: 0798-1015 • eISSN: 2739-0071 (En línea) - Revista Espacios – Vol. 45, Nº 3, Año 2024 • May-Jun
TESTA G.L. & GONZALEZ J.D. «Plataformas tecnológicas de desarrollo productivo: principales resultados de
un estudio comparativo a nivel nacional e internacional»
La reflexión sobre el Desarrollo requiere tener presente varias dimensiones, entre las que podemos mencionar:
a) Físico – geográfica
, b) Tecno – económica
, c) Político-ideológica
, d) Ecológico-ambiental
, e) Fiscal-financiera
e institucional-administrativa
y f) Sociocultural
. En consecuencia, parte de las investigaciones apuntan a que el
desarrollo territorial debe considerarse como una estrategia impulsada por un gobierno provincial, en
colaboración con actores clave de la provincia (afincados en ella y con incidencia en la misma, como empresarios,
centros de capacitación y asistencia técnica, universidades, programas nacionales de aplicación territorial,
entidades financieras, asociaciones civiles, etc.), que se concreta en una serie de líneas de actuación para
aprovechar los recursos endógenos existentes o infrautilizados, así como las oportunidades derivadas de su
situación en el entorno económico general (Díaz & Rodríguez, 2020). No obstante, el desarrollo local sigue siendo
utilizado y entendido, a menudo, de forma ambigua, a veces como el desarrollo de un nivel territorial inferior,
como puede ser el desarrollo de un municipio o de una comarca (microregión). Otras veces se utiliza para resaltar
el tipo de desarrollo endógeno que es resultado del aprovechamiento de los recursos locales de un determinado
territorio. En otras ocasiones hay quien lo presenta como una forma alternativa al tipo de desarrollo
concentrador y excluyente predominante, el cual se basa esencialmente en un enfoque vertical (de “arriba-
abajo”) en la toma de decisiones (Alburquerque, 2003). Sin embargo, el sistema productivo local, que incluye
entre otros elementos, el conjunto de relaciones y eslabonamientos productivos y comerciales relevantes para
explicar la eficiencia productiva y competitividad de la base económica de un determinado territorio no tiene
porqué coincidir con las fronteras o delimitaciones administrativas de un municipio o provincia. Así, el desarrollo
local no es sólo desarrollo endógeno. Muchas iniciativas de desarrollo local se basan también en el
aprovechamiento de oportunidades de dinamismo exógeno. Lo importante es saber “endogeneizar” dichas
oportunidades externas dentro de una estrategia de desarrollo decidida localmente (Alburquerque, 2003).
Respecto a los componentes que pueden explicar la fragilidad de las iniciativas de desarrollo local, o bien, las
principales bases de sustentación de las iniciativas de desarrollo en el territorio, Alburquerque (2003)
considerada imprescindible las siguientes: movilización y participación de actores locales, actitud proactiva del
Tiene que ver con la idea de cómo los humanos recorren sus territorios en relación con una percepción del tiempo y el espacio en ese recorrido, bajo el
supuesto de que la geografía no es geométricamente plana. Siguiendo a Walter Isard, reconocido economista y fundador de la ciencia regional, tiene en
cuenta los determinismos geográficos según los cuales podría explicarse un mayor o menor grado de Desarrollo y las cuencas hidrográficas como criterio
para la definición espacial (Díaz & Rodríguez, 2020).
En esta dimensión se explican los desbalances y las diferencias que resultan por efecto del mercado. Se considera que hay polos y centros de crecimiento
a través de los cuales se introduce el Desarrollo que es promovido por una industria que lo planea y lo mueve. A través de esta industria motriz se innova,
se difunde y se integra espacialmente. En esta dimensión se contempla tanto lo urbano como lo rural, el Desarrollo económico endógeno y económico
sostenible (Díaz & Rodríguez, 2020).
Aquí se indaga si lo que predomina es lo político-ideológico, ya que se vería expresado en la relación centro periferia y la teoría de expansión de la
dominación desde el centro. Esta dimensión de complementa con la visión sobre conflictos de interés, lo cual permite identificar las estructuras de poder
y la reflexión sobre el ejercicio democrático y de la participación (Díaz & Rodríguez, 2020).
Se piensa en una relación que une los dos aspectos de la dimensión. Tiene en cuenta el ecodesarrollo, el ordenamiento ambiental territorial y los criterios
de sostenibilidad cuando se hace la referencia a lo ambiental. Desde esta dimensión del Desarrollo se contemplan los modelos bioéticos y biopolíticos,
toma en cuenta los desarrollos urbanos sostenibles, las ciudades emergentes y lo que Leonardo Boff llama el cuidado de la casa común.7 Se destacan las
ciudades a escala humana en el entendido de un ideal de Desarrollo sostenible desde la gobernanza y en el marco del robustecimiento de valores urbanos
(Díaz & Rodríguez, 2020).
En este aspecto se combina la planificación con la intervención del Estado Nacional benefactor en la economía. La Planeación denota el horizonte temporal
de largo plazo y la planificación se refiere al periodo de gobierno, particularmente a la noción de descentralización desde lo político, administrativo y fiscal
(Díaz & Rodríguez, 2020).
La dimensión abarca el criterio de región histórico cultural y etnoregión. Lo sociocultural incluye el tratamiento de las identidades locales y regionales, la
otredad y lo multicultural. En este sentido, se incluye la visión antropológica y etnográfica, así como la idea de ciudadanía cosmopolita intercultural en el
marco de la relación global/local. Se entiende que la cultura es sujeto de procesos de mundialización y de globalización tecnológica en donde la cibercultura
expone valores que se relacionan en la red, en una lógica transversal a la cultura (Díaz & Rodríguez, 2020).