ISSN-L: 0798-1015 • eISSN: 2739-0071 (En línea) - Revista Espacios – Vol. 45, Nº 3, Año 2024 • May-Jun
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MELGAR-BAYARDO J. et al. «La motivación extrínseca e intrínseca y su relación con el compromiso organizacional
de operadores de producción de la Industria Maquiladora de Exportación (IME) de Ciudad Juárez, México»
motivación laboral es un componente clave para el rendimiento óptimo de las organizaciones, ya que influye en
la productividad, la calidad de vida, el clima laboral, así como el compromiso organizacional (Puma, 2020).
El estudio incluye revisión de literatura, en la cual se hace mención, entre otros aspectos, de las principales
teorías de la motivación y las generalidades del compromiso organizacional con sus respectivas dimensiones.
Posteriormente se aborda la metodología en la que se indica la muestra, el tipo de estudio, el enfoque bajo el
cual se realizó la investigación, etc. Los resultados obtenidos a partir del análisis de datos permiten dar respuesta
a los objetivos de investigación planteados; y finalmente se encuentran las conclusiones en el último apartado
de este artículo.
1.1. Motivación laboral
La motivación laboral es un aspecto fundamental en el entorno laboral ya que se ha demostrado que está
directamente relacionada con la satisfacción laboral y el desempeño de los trabajadores (Samanez y Placencia,
2017; Deroncele-Acosta et al., 2021). Para que las estrategias de motivación laboral sean efectivas, es crucial que
estén alineadas con las metas y valores individuales de los trabajadores (Tamayo y Paschoal, 2003). Además, se
ha encontrado que específicamente la motivación intrínseca está positivamente relacionada con la satisfacción
laboral, lo que destaca la importancia de fomentar la motivación desde el interior de cada individuo (Deroncele-
Acosta et al., 2021).
Para Lahmann (2019), la motivación “es la energía que mueve a las personas a hacer algo, y esta impacta en la
vida de los individuos”, es un proceso que siempre está en constante deseo de cumplir necesidades propias del
individuo (Ladrón, 2019). Leiva (2021), la define como “una voluntad y el esfuerzo por lograr las metas de la
organización, siempre condicionado por la capacidad de satisfacer una necesidad personalizada”. Agrega que
para lograr un óptimo nivel de motivación existen diferentes estrategias, sin embargo, es necesario poner
especial atención en algunos factores que contribuyen negativamente sobre la motivación de los colaboradores,
entre estos se encuentran: 1) políticas, normas y reglamentos internos, 2) mala estructuración de los planes de
trabajo, 3) dar por seguro al empleado, 4) poco o nulo reconocimiento, 5) relaciones negativas o conflicto con
jefes o compañeros, 6) largas jornadas sin flexibilidad, 7) falta de transparencia, 8) no ver resultados, 9)
burocracia, 10) falta de profesionalismo, educación y compromiso de las personas en su entorno y 11) falta de
dirección y organización.
Coromoto y Villon (2020) afirman que la motivación laboral es la consecuencia de la interacción de la persona y
el plus ofrecido por la empresa con el objetivo de crear elementos, para impulsar e incentivar al empleado a
lograr la meta establecida por la empresa. Juárez (2021), afirma que las personas realizan actividades bajo las
condiciones de adquirir o ganar una recompensa, premio o un castigo. Este tiene como estímulo, algo externo,
que proporciona el ambiente u otra persona, y que se aplica cuando se quiere conseguir que una persona haga
una actividad o tarea.
González-Benito et al. (2021), mencionan que dentro de las empresas existe un sin número de factores que
influyen en la motivación, la cual actúa como un motor para los empleados, para no perder la perspectiva de la
empresa.
Existen diversas teorías de motivación, Bravo, González y Duque (2018) se dieron a la tarea de hacer una
recopilación de las principales, las cuales analizan tanto factores intrísecos como extrínsecos. Dentro de las
primeras se encuentra la pirámide de Maslow (1954), en la se que identificó y clasificó en orden de importancia
las necesidades del ser humano incluyendo, dentro de las primarias, las fisiológicas o biológicas y seguridad, en
las secundarias, las sociales, las de estima y las de autorrealización. Años más tarde, Alderfer en 1972 la resume,
integrando esas mismas necesidades en tres grupos: 1) necesidades de existencia: bienestar físico, protección y
supervivencia, 2) necesidades de relacionarse con otras personas y 3) necesidades de crecimiento. La teoría
determina que cuando una necesidad de orden más alto no ha sido satisfecha, el deseo por satisfacer una
necesidad inferior aumenta (Afful-Broni y Nanyele, 2012).