ISSN-L: 0798-1015 • eISSN: 2739-0071 (En línea) - Revista Espacios – Vol. 45, Nº 3, Año 2024 • May-Jun
CAÑEDO-MARTINEZ C.«La enseñanza de la alfabetización académica bilingüe: entre discurso y acción»
y una competencia escrita en español como lengua materna que sea capaz de reflejar la comprensión de
contenidos de lectura de manera crítica, validando, justificando o refutando datos e integrando información
(Grabe y Kaplan, 2014). Estas prácticas han sido definidas por nuestro equipo de trabajo como alfabetización
académica bilingüe (AAB) con cambio de código según la habilidad que se desarrolla (Cañedo, 2020). A su vez, la
AAB como meta pedagógica, supone conocer las características de las prácticas letradas en la universidad en
general y de las prácticas discursivas propias de las disciplinas de las carreras implicadas, en particular dado que
aquella se concibe como promotora del conocimiento. En tal sentido, Bazerman (2014) expresa, «lo que se mira,
cómo se define el modo de mirar en tanto modo de conocer y los procedimientos exactos para mirar,
corresponden a la ontología, la epistemología y la metodología de un campo» (p. 14).
De esta primera fase de análisis salió a la luz lo que va a dar lugar al planteamiento del problema de investigación
de este trabajo: la circulación de discursos que desde el ámbito académico, tanto docente como estudiantil,
parecerían sostener la necesidad de profundizar saberes relacionados con la lectoescritura bilingüe puesto que
estas competencias se entraman en la ampliación y consolidación transversal de la formación epistémico-
disciplinar y se conciben como herramienta para ampliar el aprendizaje de contenidos disciplinares específicos
(Dorronzoro y Klett, 2006). Desde esta perspectiva, la lectura significativa en la lengua extranjera y la escritura
en primera lengua están orientadas a integrarse al desarrollo del futuro graduado en su formación.
1.1. Contexto de investigación
El Gabinete de Inglés es la estructura institucional dentro de la facultad que nuclea a los docentes encargados de
trabajar en alfabetización académica bilingüe para las carreras de grado que allí se dictan, las cuales están
organizadas en cuatro departamentos diferentes a saber: Departamento de Formación Docente, Departamento
de Computación y Sistemas, Departamento de Matemáticas y Departamento de Física. Inglés e Inglés II son
cátedras transversales a todos los planes de estudio de las carreras de la facultad. Los programas de las carreras
actualmente vigentes, aprobados desde los Consejos de Carreras y posteriormente por el Honorable Consejo
Académico, órgano máximo de cogobierno de la institución, describen objetivos vagos y escuetos en lo que
respecta a las asignaturas Inglés e Inglés II. Esa imprecisión en el señalamiento de contenidos y objetivos habilitó
a que se interpretaran las necesidades emergentes de las prácticas alfabetizadoras e incorporase la escritura en
castellano como objetivo complementario a la lectocomprensión en inglés de textos académicos específicos de
las disciplinas. Debido a que, ni las carreras ni la institución, tienen otra instancia formativa que atienda la
problemática de la comunicación científica dentro de sus trayectos curriculares, las dificultades de lectura y
escritura que los estudiantes presentaron recayeron en el único espacio en condiciones de atender estos saberes.
Si bien excede el campo de la AAB, otra exigencia curricular que irrumpió como demanda y se evidenció en la
circulación de discursos la constituyó la inclusión de las competencias de la oralidad en lengua inglesa,
consideradas una condición sine qua non para que los graduados de las carreras de la facultad accedan a puestos
de trabajo calificado. Consecuentemente, se desarrolló una propuesta para la adquisición de estos aprendizajes
como oferta extracurricular. Así, las carreras que tuvieran un margen de materias optativas o programa de
créditos podrían incentivar a los alumnos a que optasen por esta formación.
Entre otras modificaciones que se llevaron a cabo, se propuso un diseño de trabajo de cátedra integrado a las
necesidades del currículo, entendiendo a la asignatura como inherente al desarrollo de los contenidos
curriculares del plan de estudio de cada carrera. Esto, a su vez representó fortalecer la concepción de la
alfabetización como un proceso concurrente a la formación profesional. Finalmente, se sugirieron ajusten en la
distribución horaria, año de cursada de la asignatura en los planes de estudio, constitución de los equipos de
cátedra y la factibilidad real de desarrollar óptimamente la lectura y escritura bilingüe como proceso.
Una vez analizadas cada una de estas instancias en nuestros espacios de enseñanza y habiendo formulado las
propuestas óptimas para mejorar las prácticas pedagógicas en pos de resultados superadores, los discursos
originales que sostenían la necesidad de profundizar saberes relacionados con nuestra área disciplinar,
esencialmente con las prácticas de lectoescritura, no mostraron un apoyo equivalente reflejado en la